martes, 3 de julio de 2012

Primero nada

Se dieron un fuerte abrazo y sonrieron. No se dijeron cuánto se amaban, no hubo tiempo. Ella subió a la camioneta y jamás se volvieron a ver.

Se oyeron cuatro disparos al aire. Silencio. Corriendo salió su madre, a encontrarlo frente a la puerta. Aparte de él no había nadie.

No le gustaba lo que estudiaba, su carrera. Pero no dejaría que le quitaran lo único que tenía. Partió con la esperanza de ganar la batalla.

Miraron los cuatro hacia el cielo lleno de pólvora, miraron al frente, sólo ametralladoras. "El pueblo al pueblo", encendieron la bomba.

Él era un padre honesto, siempre pensando en sus hijos, primero en el resto. Hoy ya no tiene trabajo, hoy lo han visto robando.

Mamá, no quiero estar aquí, no quiero comer esto, ni siquiera ropa tengo. Mamá, tenemos miedo. Mamá, ¡¿por qué has muerto?!

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